miércoles, 19 de noviembre de 2014

El GCBA, a fondo con la práctica de acomodar incompetentes



Cómo se embrutece a los ciudadanos y se dilapida su dinero

A título de ejemplo reproduzco el siguiente aviso en el sitio oficial del Gobierno de la Ciudad, pero con la aclaración de que, en ese sitio, donde se ponga el ojo se verán cosas parecidas:


Desde ahora podes hacerlo!!!!. = En castellano, los signos de admiración e interrogación cierran y abren. Después de los signos de cierre el punto está de más. “Podés” lleva tilde. Tres errores.
10:30hs hasta las 18:30hs. = La abreviatura o, mejor dicho, símbolo correcto, es “h” y no “hs”, y va separada con un espacio. Cuatro errores.
Entrada general al Parque $5. Ingreso al mirador de Torre Espacial (tarifa adultos) $32. Jubilados y menores entre 6 y 13 años $16. Estacionamiento $7,50.- = El Parque no se llama “$5”. Por lo tanto, entre “Parque” y “$5” hace falta colocar una coma, o dos puntos. Lo mismo, antes de cada precio. El signo pesos se escribe separado de la cantidad: “$ 5”. Falta el artículo “la” antes de “Torre Espacial”. El guion después de “$7,50” está de más. Diez errores.
“Tarifaría” = Sin tilde. Un error.

Es casi innecesario decir que dieciocho errores en tan breve texto solo son posibles cuando se le encarga redactar las comunicaciones a un semianalfabeto. Está claro que esa persona entró al servicio de los contribuyentes sin dar una prueba de idoneidad: por “acomodo”, como se dice. Pero ello no obstaría para que, cuando hiciera falta redactar un texto dirigido al público, se eligiera a una persona alfabetizada, no precisamente al acomodado semianalfabeto: ¿no es así?
Dije en el encabezamiento “a título de ejemplo”, porque es evidente que a la misma persona que redactó este suelto —o a otra u otras de similar preparación— la ponen a escribir la mayoría de los textos de la página, la cartelería en las dependencias oficiales y en la vía pública —incluidas las placas con el nombre de las calles— y todas las leyendas en la cartografía de la Ciudad, particularmente en el Mapa Interactivo, donde es afrentoso el desquicio que se hace con los nombres de quienes en su momento la Ciudad pretendió homenajear.
¿Tendré que decir que el verdadero responsable de lo que denuncio no es el iletrado a quien pusieron a realizar una tarea para la cual no estaba capacitado?
¿O no hará falta?

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