Foto: Perfil.
Digo, cuando esta pesadilla pase —porque pasará, no tenga duda, pues “todo lo sólido se disuelve en el aire” y “en lo más profundo de la noche comienza a amanecer”—, un castigo posible a estos canallas —pienso en cfk y en Guillermo Moreno, por ejemplo— sería condenarlos a perpetuidad a tomar la sidra de $3 y a comer la canasta navideña de $11. Porque si esos productos son buenos para otros seres humanos, lo serán también para ellos, quiero creer.
¡Ah!: y que tengan que ir a conseguirlos al Mercado Central.
Que el más peronista de los peronistas se atreva a cuestionar esta propuesta.
No hay comentarios:
Publicar un comentario