martes, 7 de julio de 2009

Canción “de que”


“De que”, me dice el presidente;
“de que”, me dice el cantor, el gerente, el locutor...

“De que me va a decir algo, de que...”
Me dice que me dice “de que me va a decir,
de que me va a decir...”
¡Qué será, qué será!
“De que me va a aconsejar”; dice que me va a hablar
“de que me va a avisar...”
¡Qué demonios será que dirá, que dirá!:
dice “de que lo pensará”.
Me dice “de que le da rabia, de que”;
me dice que yo “piense de qué sucederá...”
¡Qué es lo que pasará, qué será, qué será!

Me dice que hablará —qué vergüenza le da—;
me dice “de que ya no puede soportar
de tener que explicar” lo que me dice que dirá.
Me dice “de que ya no sabe por qué la gente
no comprende de que ya sucedió”.
¡Qué cosa con la vida, que el pueblo la ve
y el que llegó hasta arriba me dice “de que”!:
de qué tartamudez, de qué cosa, tal vez,
que no puede creer, es que me dice que “de que”.

“De que me va a decir algo, de que...”
Me dice que me dice “de que me va a decir,
de que me va a decir...”
¡Qué será, qué será!
“De que me va a aconsejar”; dice que me va a hablar
“de que me va a avisar...”
¡Qué demonios será que dirá, que dirá!
Alfredo Zitarrosa.

sábado, 4 de julio de 2009

Perros y ciudadanos


Hasta hace algún tiempo, un año o un poco más, se podía encontrar un porcentaje mínimo —menor al 5%— de personas que recogían el excremento de sus perros. Ese porcentaje ha descendido muchísimo; hoy los que lo hacen son casi inhallables, y habría que colocarlos entre quienes poseen un temple y una moral a toda prueba, ya que perseveran en esa actitud de respeto al prójimo mientras la inmensa mayoría de los propietarios de canes se caga —literalmente— en los demás sin sufrir ninguna penalidad legal y ni siquiera padecer una condena social.
La ciudad de Buenos Aires, donde el desprecio a cara descubierta de los ciudadanos entre sí se pone en evidencia en eso y en todos los órdenes de la vida social, es la misma (no podría ser de otro modo) que vota en abrumadora mayoría —90%— con la orientación con que lo hizo el 28. Los que tienen y los que no tienen perros encontraron un modo común de cagarse en sus semejantes: defecando su sufragio reaccionario dentro de las urnas de votación.

lunes, 29 de junio de 2009

Bastante asquerosito


Fernando Bravo, Alejandra Peñalva y Omar Lavieri contaron hoy en su programa cómo festejaban ayer cuando Estados Unidos le ganaba a Brasil en la Copa Confederaciones, y su frustración cuando nuestros vecinos dieron vuelta el resultado. Lavieri, que fue autoridad de mesa, añadió que él escuchaba el partido y hacía de amplificador hacia las otras mesas, que aplaudían los goles yanquis. ¿Por qué sería?: ¿por rendida admiración a la tradicional escuela de buen fútbol estadounidense? ¿Por simpatía con un país campeón en invasiones, marines y bombardeos? ¿O sería acaso complejo de inferioridad, indisimulable rencor o pura y cochina envidia?
A usted, ¿qué le parece?

Entre lo horrible, lo curioso


Siete boletas llevaron una misma lista de candidatos a legisladores de la Ciudad de Buenos Aires —encabezada por Alfredo Reto, en letras bien grandes—, o sea que eligieron su figura para arrastrar el voto de los vecinos.
Que me perdone Reto mi ignorancia, pero no lo saco: ¿nos conocemos de algún lado?
Claro que a partir de ayer algo sé de Reto, porque una de las siete es la del Modín: está bien que la casi totalidad de las boletas —en especial las que sacaron muchos votos— son horribles, pero la del Modín es más horrible, si cabe.
Lo curioso, aparte de que siete partidos lleven la misma lista de candidatos a legisladores dispersa en siete boletas, es que dos de ellas, la 289 y la 296, tienen también idénticos candidatos a diputados nacionales: ¡todo igual!; la única diferencia es el nombre del partido. Que alguien me explique esto antes de que me reviente la croqueta.

miércoles, 24 de junio de 2009

"Miyel Bayelé en Wáyinton"


Sobre esta noticia, así pronunciada, se basó el comentario de Jorge Elías esta mañana en Radio Continental. Su colega en el mismo programa Daniel López nos ha recordado varias veces que "Miyel Bayelé fue detenida y torturada tras la caída de Ashende".
Además:

—En una propaganda grabada invitan a un "you" en San Juan y Boedo.
—El pronosticador de la radio dice: "Pilcomasho: ashí va a seguir la shuvia, aunque sha disminushó".
—Nos cuentan que "Yakira estuvo con la presidente".
Etcétera.

Estos trastrocamientos y barbarismos fonéticos se llaman "metaplasmos", y consisten en agregar, quitar o alterar las letras en una palabra. De ellos habría que excusar a quienes tienen un defecto foniátrico por el cual no pueden pronunciar algún sonido, como, por ejemplo, el "sh". Desde ya, emplear como locutor a alguien con este problema sería tan incomprensible como contratar a un pintor ciego o, cuanto menos, daltónico. Pero no se trata de eso en quienes están ante los micrófonos de Continental: hace unos años era sólo Daniel López y alguno más, pero ahora la peste ha corrido en esa radio y cuesta encontrar a alguno —si lo hay— que no trueque los sonidos de la "ye" y la "sh". Y se trata de pura idiocia, ya que pueden pronunciar perfectamente el sonido "sh", como lo demuestran cuando dicen "cashe" (por "calle"), o "sho" (por "yo"). Es debilidad mental, necedad, y un necio no debiera estar en un lugar formador de opinión pública... salvo que se quiera entontecernos.
A las señoras y señores que han tenido que abandonar sus estudios tempranamente, y han completado su cultura oyendo la radio y viendo televisión (o sea, se han embrutecido e idiotizado en grado terminal), los programas de Magdalena y Víctor Hugo les parecen admirables y proclaman la alta calificación intelectual de los conductores y sus equipos: doy fe, porque se los oigo decir vuelta a vuelta. En realidad, pobrecitos, no hacen sino repetir aquello de lo que la misma radio alardea, en todos sus programas: lo capos y brillantes que son y su prolijo cuidado y respeto por el idioma (dime de qué te jactas y te diré de qué careces).
Si la Radio Continental fuera un referente cultural, sería hora de cazar un bufoso y chau. Porque la propia página de inicio del sitio web de la radio (http://www.continental.com.ar/) demuestra que no saben siquiera cómo se llama su personal. Así, anuncian "La Mañana, con Victor Hugo Morales", o a "Nestor Clivati", o a "Angels" Barceló la llaman así, o "Ángels", a tres centímetros de distancia.
No se crea que todo se reduce a tildes (acentos) o vicios de dicción. Eso es apenas uno de los síntomas. Los que hacen la radio, además de haber virado bien a la derecha en estos últimos tiempos —y más, si cabe, con la incorporación de Fernando Bravo y Paulino Rodríguez— tienen un revoltijo mental que es funcional a ese viraje. Por ejemplo, Víctor Hugo dice "insólito: se ha cortado la comunicación, esto suele pasar"; Daniel López, que Fulano está "internado con riesgo de vida", y también que "en la caricatura de Sábat, Massa se está tirando a una pileta absolutamente vacía que tiene apenas un charquito de agua"; Jorge Forbes, desde París, que "el embajador se hizo presente en la presentación, que contó con la presencia de muchas empresas, que presentaron..." (y así, durante un minuto y medio o dos, en los cuales dijo "presente", "presencia", "presentar", "representante", y otras variantes de la misma raíz decenas de veces), y la experta leguleya Cintia (o como se escriba) García, ventosea "plesbicito" y "ad joc".
No sé, capaz que estoy exagerando. Mejor, ya que es la hora, me pongo a escuchar el noticiario de la radio. A ver:

"Un ciclista fue atropellado por un vehículo; éste resultó gravemente herido."

Ah.

sábado, 20 de junio de 2009

Democracia muy curiosa


Dice Vicente Romano que si es cierta la afirmación de los fabricantes de opinión y de los medios públicos de información, de que vivimos en una democracia, resulta entonces que los trabajadores —asalariados y autónomos— y los pequeños empresarios han decidido renunciar conscientemente a casas cómodas, instalaciones recreativas, buenos transportes, hospitales y escuelas, y ceder, en cambio, unos cuantos billones a los monopolios y los grandes empresarios para que los destinen a bienes suntuosos, ostentación y consumos que derrochan bienes no renovables y deterioran el ambiente.
(Bueno, ¡también, si le va a andar buscando el pelo al huevo...!)

Tévez no aceptó


Carlos Tévez rechazó la propuesta del Manchester United de firmar un contrato por cinco años y treinta millones de euros.
El suspiro de alivio de los dirigentes hizo volar techos y derribó árboles en un radio que abarcó Inglaterra hasta más allá de Birmingham, y parte de Escocia y Gales.

martes, 16 de junio de 2009

La matraca


Cuenta la leyenda que un cazador que andaba por la selva africana vio en las ramas de un árbol a un gigantesco simio que descansaba, mordisqueando indolente el tallo de una margarita.
Sin pensarlo dos veces, ya que se trataba del ejemplar más grande del que hubiera tenido noticias —una pieza récord—, alzó el arma y disparó. El gorila cayó, rompiendo ramas y haciendo estremecer el follaje cuando golpeó en el suelo. El cazador se acercó con precaución: el animal, imponente, yacía exánime. Pero cuando lo tocó, apenas, con la punta de la bota, se revolvió, lo inmovilizó con sus poderosos brazos y lo sometió sexualmente repetidas veces. Después de varias horas lo dejó libre, previo doblarle el rifle en cuatro.
Mientras convalecía en el campamento, el cazador no dejó de pensar en la derrota y en la afrenta. Por eso, en cuanto se repuso, tomó un arma de un calibre mayor y salió a buscar revancha. No tardó en encontrar al gorila, en proximidades del lugar de la primera vez, y lo derribó con un certero disparo. Pero esta vez no se confió tanto: estuvo acechando el cuerpo caído larguísimo rato, hasta convencerse de que no presentaba ningún signo vital. Sólo entonces comenzó a acercarse, hasta poder ver la horrible herida que le había causado la potente arma. Sintió orgullo y pena, a la vez. Estaba vengado. Estiró el brazo para sacarle la flor de entre los dientes, pero entonces el gorila lo abrazó y lo sodomizó reiteradamente, con el agregado de un ultraje con el rifle totalmente innecesario.
Volvió el cazador a su tienda como pudo, rumiando venganza. Si tenía otra oportunidad no se confiaría en absoluto. En cuanto estuvo recuperado se proveyó del arma más potente que pudo conseguir, con cartuchos para elefante, y fue por la revancha. Efectivamente, encontró al simio y le disparó al corazón. Un tumulto de animales huyó por la selva al oír el brutal estampido. El gorila cayó entre los matorrales. El cazador, sin acercarse, disparó otras veces al bulto hasta agotar las balas. Luego fue aproximándose en círculos cada vez más estrechos, hasta que pudo verlo: era un guiñapo sanguinolento. Tomó una rama larga y lo empujó y azuzó: lo mismo que si hubiera tocado un trapo. Lo movió con el cañón del fusil: inerte. Se inclinó para ver las terribles heridas: entonces el gorila lo aferró, le desgarró las ropas y antes de comenzar a violarlo exclamó, casi asombrado:
—¡Cómo te gusta la matraca...!

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Al cazador “le pasó” tres veces. A los que votan al peronismo (en todas sus presentaciones: jarabe, comprimidos, gotas y, la más usual, supositorios) muchas más: ¡cómo les gusta la matraca! ¡Y, pensando en el futuro, ya están preparando nuevos reciclamientos!
¡De no creer!

sábado, 13 de junio de 2009

Basura: varios temas en una sola imagen

Pobreza y desigualdad social
Trabajo infantil e informal
Consumismo desenfrenado
Disposición de los residuos inadecuada e insalubre
Invasión de envoltorios no biodegradables

miércoles, 10 de junio de 2009

¿Presidente o presidenta?

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Test oportuno

Hay un cúmulo de expresiones populares que portan en sí mismas modelos culturales o “saberes” compartidos, los cuales llenan vacíos ideológicos en sectores sociales más o menos amplios. Cuando son absurdas, o prejuiciosas, o contienen errores flagrantes, su repetición hace un trabajo de zapa sobre la conciencia y la inteligencia de sus propaladores y de los destinatarios que no las repudian. A continuación transcribo algunas frases de esas variedades nocivas (con signos de admiración, porque la tontería siempre es enfática) y una evaluación de las consecuencias derivadas de su utilización:

¡Perdido como turco en la neblina!
¡La prostitución es el oficio más antiguo del mundo!
¡Nunca es triste la verdad; lo que no tiene es remedio!
¡Lo dice la editorial de “La Nación”! (o “Clarín”, o “Pagina/12”, etc.)
¡Hay que votar al que tiene guita: ése no va a robar porque ya está hecho! (o su espejo: ¡Pobre, pero honrado!).
¡Para un argentino no hay nada mejor que otro argentino!
¡Hablá más fuerte que no te escucho! (o ¡no se escucha bien!, etc.).
¡Yo ahí voy sólo los días de semana!
¡Nos la pasamos encerrados en el hotel porque hizo un clima espantoso!
¡Es la excepción que confirma la regla!

Resultado, en función de cuántas de esas frases suele decir alguien:

Ninguna: No sé qué clase de persona es usted, pero parece que el mate le funciona, o sea que si es jodido es muy jodido, y si es solidario y buena persona es muy útil a la sociedad.

1 a 3: Está bastante bien, pero le patina un poco. Suspenda la tele y trate de ejercitar el pensamiento crítico.

4 a 6: Dígale a su maestra de primer grado que lo de la chinche en la silla fue cosa de chicos y recomience la primaria.

7 a 9: ¡Está salvado!: conductores-locutores como usted es lo que la radio y la TV están demandando permanentemente.

10: Voto cantado: usted va a votar por el kirchnerismo, De Narváez, Solanas o Reutemann. Lo cual está bien... salvo que usted sea un trabajador o un excluido.

Testimonio de un vidente

“Me llamo José, nací y vivo en Chivilcoy, Bs. As., tengo 27 años y una experiencia de las que se suelen llamar paranormales. [...] He visto duendes, espíritus, me enfrenté con una fuerza oscura cuando ya tenía 15 o 16 años, vi seres diminutos traslucidos que están en el aire (que es muy raro, hay que verlo), vi platillos voladores, el mejor fue cerca de Gral. Hacha, La Pampa.”

[Vio de todo, menos el cartel con el nombre del pueblo, y un diccionario. Pero ese plato volador de General Acha, doy fe, era “full-full”, el mejor: color metalizado, doble air bag, ABS, aire acondicionado, cierre centralizado de puertas, MP3, vidrios polarizados, escape deportivo. Una nave.]

miércoles, 6 de mayo de 2009

Vivo la muerte de mis hermanos

No me subieron a un avión
ni me abrieron con un corvo el vientre
tampoco me arrojaron al mar
pero me subieron hasta casi donde no se resiste
ni la fiebre ni el horror
y abrieron mi corazón para que lo poblara
la angustia la desesperación
luego me arrojaron a la ciudad como al mar
a sucuchos de mala muerte y peor vida
y el pan de cada día me lo negaron
con pretextos ensangrentados.
No me enterraron en una fosa común
pero sí me enterraron en mí mismo
como en una celda de cemento fría y húmeda.
He estado en mí sin juicio alguno
pero de vez en cuando me torturan con los aniversarios
a los que le suman la tortura psicológica
como internarme en la risa de las pantallas de televisión
en ese territorio donde no hay caminos ni salidas
y el frío mortuorio entra en mi sangre y repto sobre la sangre.
En verdad no soy un detenido desaparecido
pero soy un detenido alguien que se para
antes de decir la verdad a los asesinos que andan sueltos
y soy un desaparecido busco preguntando dónde está
el muchacho idealista que luchaba contra la dictadura
dónde está el joven enamorado de la libertad y la justicia.
No me subieron a un avión ni me rajaron el vientre
ni me lanzaron al mar
pero lo que hicieron conmigo se parece tanto a eso
que a veces grito buscándome
y me desespero porque pasan los años y no me encuentro.

Osvaldo Ulloa.

(Agencia Walsh- No Todo Es Verso – 16-11-2008.)

viernes, 1 de mayo de 2009

Cautivos en manos de idiotas



“Una persona estúpida es la que causa un daño a otra persona o grupo de personas sin obtener, al mismo tiempo, un provecho para sí, o incluso obteniendo un perjuicio.”
Carlo Cipolla.


Esta semana recibí —con un adjunto en pps— un mail titulado “Cafe [sic] y dengue”, que pesó 3070 KB. ¿Por qué pesó tanto?: porque incluye unas fotos de un pocillo de café, de un par de jardines de casas elegantes y de una huerta, y el dibujo cómico de un mosquito. Ese correo, en un día de tráfico particularmente lento en la red, tardó casi 30 minutos —tengo conexión telefónica— en bajar a mi computadora. Las imágenes —lo ratifico, por si no fui claro— no agregaban absolutamente nada a la comprensión del mensaje. El texto, o sea lo que pudiera, según el juicio de cada uno, tener de útil ese correo, pesaba 3,44 KB. Entiéndase: con cerca de novecientas veces menos KB se podría transmitir lo mismo... pero mejor.

Sabemos que las empresas de comunicación y los prestadores de servicios de internet ganan de acuerdo con el tiempo de conexión que brindan: estos correos pesados son, claramente, el negocio de ellos y por eso los estimulan.

Pero, ¿qué ganamos los usuarios? Para empezar a entrarle a esta cuestión por algún lado, les cuento que esta semana, también, salió la información de que “el envío de correos no deseados a las computadoras de todo el mundo supone a lo largo de todo un año un gasto energético de 33.000 millones de kilovatios hora (Kwh), una cantidad de electricidad que podría abastecer a 2,4 millones de hogares”. Y esto incluye a spam que pesan 2 o 3 KB, como algunos que recibo: figúrense el daño que causan correos que pesan mil veces más (y que, paradójicamente, quienes los envían, si tienen ocasión, se declaran ardientes defensores del ambiente sano y campeones de la lucha contra la contaminación).

Además de este derroche de energía y la contaminación que ello causa, consideremos la pérdida de tiempo infligida a los destinatarios y la ralentización de toda la red a causa de esta basura dando vueltas y acumulándose en las memorias de los servidores. O sea, estamos dilapidando la adecuada utilización de un instrumento que debiéramos usar con economía y pericia casi quirúrgicas.

Sin embargo, sabemos que hay gente idiota (no es un insulto, es un diagnóstico) que cada vez que recibe un correo con dibujitos dice ¡qué lindo! e inmediatamente lo reenvía a sus contactos y, lo que es peor, a las listas de correo que, si vamos a su origen, se gestaron para intercambiar ágilmente información con una temática determinada.


Y aquí estamos los suscriptores de esas listas: cautivos en manos de idiotas. Expuestos a infradotados de mentalidad tan infantil que necesitan que un texto sea acompañado de figuritas, aunque éstas no agreguen ninguna información. Necios que nos mandan a mansalva sus detritos. Impunemente.

Muchos de estos correos imbéciles son emitidos en horarios laborables, lo cual hace pensar que, al menos, los costos de algunos de ellos, en términos de conexión, de equipos y de tiempo no corren a cargo de sus autores. Pero sí de quienes los recibimos en nuestras computadoras hogareñas.

Más cosas paradójicas

Es curioso que muchas veces los mensajes que indican un procedimiento, como en el reciente caso de la “trampa para mosquitos”, ¡vienen sin ninguna imagen demostrativa! Y, lo que es aún más asombroso, que responsables de listas envíen, trunco, el principio de mensajes de texto —que raramente superan los 200 KB—, con la leyenda “Quien lo quiera completo, que lo pida”, y en cambio no nos consulten, por ejemplo, para enviarnos un cartel perfectamente omitible, como el titulado “Peña ‘Los nueve monstruos’”, de 3350 KB.

Daré otros ejemplos: esta semana bajé de internet un trabajo de 55 páginas —un pequeños libro— en cuerpo 12, formateado en Word (cuerpos de títulos y subtítulos, tipos y colores de letras, notas, etcétera): 372 KB. Compárese con los 3232 KB del desmesurado e inútil cartel (“III Fiesta de la semilla en Buenos Aires”) que manda un idiota, tan desproporcionado que hay que mover varias veces las barras de desplazamiento para verlo por pedazos, sin lograr una imagen completa porque no cabe en la pantalla, ni en sentido vertical ni horizontal. El texto que acompaña a este cartel pesa 41,5 KB: o sea que lo “importante” del mensaje se podía decir con 3190 KB menos de derroche de energía, de tiempo, de espacio en la red virtual. Y lo de “importante” lo escribo así entre comillas pues, en definitiva, qué es lo importante para sí lo decide, como dije, cada destinatario, pero lo que el destinatario no puede elegir es el “peso” con que recibe cada envío, pues eso lo ha decidido el emisor: es irreversible.

Cuando uno se dirige a un grupo de destinatarios, como, por ejemplo, una lista de correos, debe guiarse por la mesura y la prudencia, y no bloquearles la casilla, prácticamente, con mensajes pesadísimos que quizás al destinatario ni le conciernen ni le atraen. Pero, claro: ¿cómo pedirle a un idiota mesura, prudencia, criterio, consideración por los demás?

Están también los que mandan correos a una lista cuyos mensajes no leen, de modo que reiteran cosas ya publicadas. Muchachos, tengan un mínimo de compromiso con las listas a las cuales pertenecen: si NO leen los mensajes procedentes de ellas, tampoco escriban en ellas.

Soluciones

Lamentablemente, es difícil, dado el grado de deterioro de la subjetividad que padecen muchas personas, entenderse con ellas en términos de racionalidad. Quizá, si en las listas se pudiera colocar un filtro para bloquear los mensajes superiores a 200 KB (que ya es una enormidad), eso sería una solución. Si esto no fuera factible, se podría pensar en hacer una primera advertencia a quien manda un correo pesado, y a la segunda vez se lo borra de la lista.
Y las personas honestas e inteligentes, cuando tienen algún correo muy pesado que consideran de posible interés para el grupo, siempre cuentan con el recurso de mandar uno previo resumiendo su contenido y ofreciendo a quien lo quiera enviárselo completo a su casilla personal.

martes, 28 de abril de 2009

Flavia desmintió que no sea una prostituta


“Y es sabida la tendencia del Padrino Franco [Macri] de involucrarse con mujeres más jóvenes que él y pagarles toda la fiesta. Siendo el caso más patético el de su reciente relación con la ex conductora de programas infantiles Flavia Palmiero. Para la carcajada: Flavia se vio obligada a desmentir ante todos los medios del corazón que no era una prostituta...”
Ricardo White, para El Ojo Digital Política, 25-4-09.
http://www.elojodigital.com/politica/2009/04/25/1610.html

Podría alguien interpretarlo como una sutileza de White, para poner en labios de Palmiero lo que él quisiera decir, pero quien lee sus textos se da cuenta de que es incapaz de semejante agudeza.
Piénsese, nomás, que otro ejemplo de lo que White esgrime como la “tendencia del Padrino Franco de involucrarse con mujeres más jóvenes que él” lo expone en el párrafo anterior, por la relación que tuvo con la “casi septuagenaria” y "gagá" Nacha Guevara (según White, cuando comenta sus recientes performances escénicas). ¿En qué quedamos?: cuando quiere denostar a Nacha como artista, la avejenta (lo cual es un tiro por la culata, ya que en ese sentido Nacha es casi prodigiosa); cuando necesita embestir contra Macri, es poco menos que una pendeja.
Con este tipo de bestialidades nos orinan todos los días, tanto los partidarios del gobierno de los KK, como sus competidores de derecha.
Por favor, un paraguas.

viernes, 10 de abril de 2009

Zenón de Elea y mi reloj barato


La pregunta —capciosa, ilusoria— es cuántas veces en 24 horas —de 0 hora a 0 hora— las agujas de la hora y del minutero en un reloj analógico quedan opuestas. Es evidente, según ya lo descubrió Zenón, que si partimos de la 0 hora, en que están superpuestas, la aguja del minutero nunca podrá quedar en oposición a la de las horas, porque cuando haya recorrido 180º, la de las horas se habrá movido 15º, y cuando la del minutero haya apurado esos 15º ya la de las horas se habrá desplazado 1º y 1/4, y cuando la del minutero se mueva ese 1,25º... Así, infinitamente.

Pero quizá porque mi reloj no es de marca, incumple esa límpida deducción lógica, y la aguja del minutero queda opuesta (y la pasa, también) a la de las horas a cada rato. Eso de "a cada rato" es el tema que atrajo mi atención: ¿cada cuánto tiempo se vuelve a repetir esa situación en el tacho de porquería que yo tengo? Eso quiero averiguar, antes de tirarlo a la basura y sumirme en el helado abismo del tiempo zenoniano.

Para que ambas agujas estén opuestas debe existir entre ellas una diferencia de 180º, la cual se alcanzará en un tiempo "x". La velocidad de la aguja de las horas (30º cada 60 minutos) multiplicada por x tiene que barrer un ángulo inferior en 180º al que recorre el minutero (360º cada 60 minutos) en ese mismo tiempo x. Esto se puede formular así:



x . 30º/60m + 180º = x . 360º/60m

De donde:

180º = x . 330º/60m

Y

x = (180º/330º) 60m

O sea

x = 32,7273m (equivalentes a 32 minutos y 44 segundos).



De modo que a las 0 h, 32 minutos y 44 segundos las agujas se ponen en oposición (y no sólo en mi reloj barato, sino también de acuerdo con estas ecuaciones). Entonces, para que vuelvan a quedar superpuestas como lo estaban a la cero hora, deberán transcurrir otros 32 minutos y 44 segundos, y para que se vuelvan a oponer, desde que lo hicieron por primera vez, 65 minutos y 28 segundos, o sea, a la una, 38 minutos y 12 segundos. Faltarán más o menos 10 horas con 22 minutos para que el ciclo se reinicie a las 12: 622 minutos divididos 65 y medio dan para que la oposición suceda nueve veces más, que adicionadas a las dos anteriores suman once. Once, en dos ciclos iguales, totalizan 22 veces cada 24 horas, S. E. u O.

Ahora compruebo que las matemáticas están en conflicto con la lógica y que mi modesto reloj, en ese brete, ha obtenido el aval de aquéllas. Encontró una buena coartada, el muy pícaro; me parece que no lo voy a tirar.
.

domingo, 5 de abril de 2009

Miss Universo en Guantánamo


En el sitio de Kaos en la Red se puede leer que Miss Universo 2008, Dayana Mendoza, de Venezuela, y Miss EE.UU., Crystle Stewart, realizaron una visita a la base naval estadounidense en Guantánamo a partir del viernes 20 de marzo, encontrándola "interesante". En su página web, Mendoza explica que ambas reinas de la belleza llegaron a la base con el propósito de saludar y entretener al personal militar allí destacado. "Fue una experiencia increíble", señaló la venezolana. Mendoza dijo que ella y su acompañante conversaron con el personal de Guantánamo "acerca de la base y cómo es la vida allí, y los próximos días lo pasamos maravilloso, en un viaje realmente memorable". El personal de la base naval llevó a las dos mujeres a una visita a un "barco", no identificado por Mendoza, y a un recorrido por tierra que "fue muy, muy divertido". "También vimos los perros militares y nos hicieron una demostración muy linda de sus destrezas", agregó Mendoza. "Toda la gente del Ejército se portó muy bien con nosotras". "Visitamos los campos de detenidos y vimos las cárceles, dónde se bañan, cómo se entretienen con películas, clases de arte, libros", agregó. "Fue muy interesante."
Yo no creo que se pueda pasar con una lanchita frente a la base de Guantánamo y decir "vamos a ver qué hay acá". Si usted cree eso, inténtelo. Lo que se deduce es que a ambas las llevaron ahí como dos fardos, como cachos de carne con ojos. Queda en evidencia (por si aún hiciera falta) que la elección de una Miss Universo y las actividades a que se obliga la "agraciada" tienen una finalidad política feroz y descarada.
Como corolario, un dato a tener en cuenta (atención, racistas): Dayana Mendoza no es rubia.

viernes, 20 de marzo de 2009

Ballena: pescado de monstruoso tamaño


Ballena: pescado de monstruoso tamaño, el mayor que produce la mar. Plinio dice que suele tener 600 pies* de longitud y 360 de latitud, y la experiencia muestra ser así, por algunas que se cogen en nuestras costas de Cantabria y Asturias. [...] No desova ni pone huevos como los demás peces, sino pare animal formado y perfecto, como los cuadrúpedos terrestres.” Diccionario de la Lengua Castellana – Dedicado a nuestro señor Don Phelipe V (que Dios guarde). Compuesto por la Real Academia Española, Madrid, 1726.
* El pie, en Castilla, mide 28 cm, por lo cual las medidas dadas representan 168 metros de largo por 101 metros de ancho.

miércoles, 18 de febrero de 2009

Crisis... ¿cuál de ellas?

Con diferencia de pocos días, recibo dos correos electrónicos referentes a la crisis financiera y los salvatajes impulsados por diversos gobiernos. El primero, acerca de los 700.000 millones de dólares destinados a apuntalar a los bancos estadounidenses. Asegura que si ese dinero se repartiera entre los 6.700 millones de habitantes del mundo, a cada uno le tocarían 104 millones de dólares. No es correcto: serían 104 dólares por cabeza.
El segundo correo repite lo anterior y agrega el caso español: dice que en ese país la ayuda llegará a los 30.000 millones de euros, que si se los repartiera entre los 46.063.511 hispanos, da a razón de 652,18 millones de euros para cada uno de ellos. Independientemente de que ese cociente da 651,27, el tema es que son euros, y no millones de euros: pequeño detalle.
Quiero decir: un millón de diferencia puede ser mucho o ser insignificante. Si yo, en lugar de tener 100 pesos en el banco, tuviera $1.000.100, la diferencia sería muy importante, al menos para mí. Si, en cambio, alguien cree que España tiene 45 millones de habitantes, pero tiene 46 millones, se lo puede disculpar, y aun felicitar por su aproximación al dato correcto. En cambio, una diferencia de un millón de veces es siempre brutal y revela una carencia absoluta de noción de las relaciones específicas del tema al cual se refieren. Por ejemplo: supongamos que el PBI anual de la Argentina es de 230.000 millones de dólares (el dato real, IndeK mediante, ha pasado a ser un misterio). Bien, en ese caso, si alguien cree que el PBI es de 230.000 dólares, no tiene ni idea. Otro ejemplo: la distancia Buenos Aires - Pekín, en números redondos, se aproxima a los 20.000 kilómetros: aquel a quien le parece que serán unos 20.000 millones de kilómetros está privado de los más elementales conocimientos acerca de las dimensiones del planeta en que habita.
Los correos a que hago referencia circulan por las listas de las asambleas y, además —ellos mismos lo dicen—, son leídos en la radio y comentados en la televisión. A mí me llegan enviados por personas inteligentes y cultas, cuyos certificados académicos son superiores a los míos. Las aberrantes equivocaciones en simples multiplicaciones y divisiones, sencillísimas en tiempos de calculadoras y computadoras, sumadas a la falta de criterio de no reparar en lo asombroso de las cifras que proponen, hablan del creciente deterioro de la subjetividad de personas que, no obstante, conservan cierta competencia en su desempeño profesional. Sin embargo, este desenganche de la realidad lo estamos pagando caro, aquí y en todo el mundo. ¿Por qué?: porque las decisiones que se refieren a la sociedad deben tomarse sobre la base de un conocimiento global de los factores sociales, políticos y económicos, pero se toman en función de mitos disparatados. Para dar un ejemplo, uno sólo, de esos mitos, mencionaré el más ponzoñoso de ellos: "Para un argentino, no hay nada mejor que otro argentino". Espero comentarlo próximamente, ya que me ha llegado otro correo que claramente se apoya en esa falsedad.

viernes, 13 de febrero de 2009

Disparates

La ley 1420 (año 1884), de educación común, obligatoria, gratuita y laica creó en el país las condiciones para una educación pública de calidad —en sus distintos niveles— reconocida internacionalmente. Durante décadas, su efecto se irradió a todos los ámbitos de nuestra sociedad. Y, por supuesto, también de nuestra cultura: la literatura, las artes, la prensa, los medios masivos de comunicación en general. La Iglesia embistió desde el principio contra esa magna institución, pero fue recién en 1958, gobierno de Frondizi, cuando pudo infligirle una herida que la desangró.
Hoy, si bien hay bastiones que resisten, la educación gratuita y de calidad para todos es cosa del pasado: semianalfabetos y deficientes mentales reciben sus certificados no solamente de escolaridad primaria, sino de los niveles medio y universitario.
Donde ello se nota más, porque su índole es someterse a la exposición pública, es en los medios masivos de comunicación.
Voy a dar algunos ejemplos de este deterioro, y prometo (¿o amenazo?) continuar con ellos en sucesivas tandas.


¿Belgrano o Lifschitz?

Mariel Caro, locutora de la radio de Hebe, nos anotició de que, en la ceremonia por el aniversario del primer izamiento de la bandera por Belgrano, en las barrancas del Paraná en Rosario, “el intendente Lifschitz hizo la enseña patria” (27-2-08, 8.30)

Cuota exorbitante

La misma locutora aseveró que “la cuota del Pilcomayo sobrepasó los cuatro metros” (28-1-08).

¡Al fin: entubarán el Maldonado!

Eso comentan Mactas y las coconductoras de “El Toque”: “De acuerdo con el plan de obras en la zona de Palermo —dicen— en el primer trimestre de 2009 se iniciarán las del entubamiento del arroyo Maldonado”. Enseguida, Alejandra Peñalva, con viril aplomo, informa que en un lugar en que ella estuvo "asan el animal parado", y que "lo atan pedacito por pedacito para que no se caiga el animal cuando se va asando". Y enseguida hablan de las benignidades del clima en "Las Grutas, en el golfo San Martín" (31-12-08, 14.20/14.40).

¿Peroneo, perineo, peroné o neoperonista?

En el informativo Siempre Noticias de Radio 10 dicen y repiten en sucesivas emisiones que Di María no podrá jugar en el seleccionado contra Escocia porque “tiene una fisura en el peroneo”.

¡Todos a la haulas!

El diario “Clarín” nos propone “un par de jornadas gratuitas en el Haula Virtual: Trabajo y Soft” (12-04-06).

Los antropófagos, de parabienes

"Trescientos millones de habitantes produce la Argentina como para alimentar" (Susana Andrada, AM 590, 6-3-08, 10.30).

Enigma para lógicos

“Se equivocan algunos sectores que niegan que el voto a Zamora no es de izquierda (Miguel Sorans).

Me parece de que Petcoff es medio bestia

“El intendente, los comerciantes, etcétera, tratan de impedir de que no vayan los piqueteros a Mar del Plata” (Graciela Petcoff, "Graves y Agudos", Radio Cooperativa).

Más dudas que certezas

Página 12, 9-3-08 (textual):
Una mujer cayó de un tercer piso y resultó ilesa
”Una mujer de 62 años estaba colgando la ropa en la terraza del edificio y perdió el equilibrio. Tras caer, un albañil que estaba trabajando en la zona dio parte al servicio de emergencia y la fue llevada al hospital San Bernardo donde se recupera satisfactoriamente”.
¿El albañil también se cayó? ¿Quién es “la”: la ropa, la terraza? Si resultó ilesa, ¿qué hace en el hospital, y de qué se recupera? ¿Puede alguien recuperarse y esto causar insatisfacción?

Típico oyente de Mega

Llama un oyente y deja un mensaje diciendo que "la piratería de la música vive un momento muy difícil". Por dos o tres balbuceos que agrega se interpreta que lo que quisiera decir es que son la industria discográfica y los músicos los que pasan una situación complicada (Mega, 27-4-08, 22 hs.).

Fanfárreas y calecitas para todos

El Boletín 125 “La Cultura de la Semana” —23 al 29 de enero de 2009—, del Ministerio de Cultura del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, nos informa que “coloridas fanfárreas” alegrarán la nueva peatonal Reconquista. Además, “teatro y calecitas” es la propuesta para el Anfiteatro de Mataderos. Pero si a uno tanta cultura lo empalaga, puede no recibir más el boletín cliqueando en “borrar suscrpicion”.

¿Y las varonesas, qué dirán?

El 19-11-08 Crítica digital titula “Los varones K siguen contra Solá”, y en un subtítulo agrega que “Los barones del conurbano también se suman”.
Contra esa conspiración de la ortografía no es fácil que Solá llegue lejos (felizmente).

Unas más, surtidas

—“Huyeron en un Fiat Duna con cinco malvivientes al volante”; “Murieron tres personas y dos bolivianos” (cosas que se leyeron en "Crónica".)

—“Este hombre, Suárez, tiene cerca de más de 80 años” (Radio Mitre, 1-4-04, 11.55).

—“Choque en Monserrat entre un taxi y un auto: un herido”: Pregunto yo, el taxi, qué sería, ¿un rickshaw? (“Clarín”, 21-10-07. También lo pasaron por Radio Continental, a las 10, en el noticiero).

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Lo he dicho ya y lo repetiré hasta el hartazgo: si uno deja que estas aberraciones lógicas se le instalen en el cerebro, sin impugnarlas y rechazarlas, pronto terminará babeando y orinándose encima. Y, lo que es peor, votando al peronismo.