Banksy regaló un mural a una
escuela de Brístol
Flor de regalo
Pobrecitos niños. Pobres de nosotros. Pobre planeta
Inexplicable. Para no decir otros epítetos que le calzan mejor a este mural de Banksy.
Por el incendio de Seseña muchos se han desayunado de los
terribles efectos ambientales: para la vida, para el aire, para el agua, de la
quema de neumáticos.
Muchos, pero no todos. No las autoridades de educación inglesas,
ni las de ese colegio de Bristol; no los que han escrito notas en la prensa, ni
los responsables de esos medios; no los que comentan en los portales de
internet.
En el mural la quema de un neumático es presentada como una
faena plausible, simpática, y un camino que intermedia entre el mundo humano
—la casa— y la naturaleza —la flor—.
Y, encima, un camino a ser recorrido en forma individual. Y para
que sea más "políticamente correcto", por una niña —una mujer—.
"Muchas de las piezas de
Banksy son creadas en un avanzado estado de intoxicación": ajá. ¿Y los que
las festejan de modo acrítico, qué?
@juandelsur2
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