sábado, 19 de noviembre de 2011

Bonasso pide “regalías decentes”

Bonasso: "Regalías, más control, más que se jodan los chilenos, y esto es fiesta".


Ahora resulta que a la minería a cielo abierto solo hay que “controlarla”. Y si paga bien, puede contaminar y matar.

En “Perfil” de ayer* “Cogote” Bonasso se agarra de las mechas con otra media vedette del peronismo, Rafael Bielsa. Es bueno, eso, porque se conocen y se sacan los trapitos al sol. (Bah, bueno sería si hubiera alguien que no supiera quiénes son.)

Más útil, me parece, es que los que se pelean, en la pelotera suelen irse de boca. Por ejemplo, dice Bonasso:

“El Estado soberano debe actuar con sus propios recursos. Para controlar, por ejemplo, lo que hace en el área estratégica de los Andes una empresa vinculada a Bush y la CIA, no puede aceptar que la corporación en cuestión se haga cargo de los gastos y para eso debe cobrar impuestos y regalías decentes. No el módico 3 por ciento que fijó Carlos Menem y sigue vigente.”

¿Leyó bien?: Bonasso pide “regalías decentes” (otros —otras— piden “capitalismo serio”: es una mutación del mismo virus).

Bonasso lo vuelve a decir: si se ponen con unos cuantos morlacos más, ya la minería a cielo abierto podría no ser tan mala. ¿Qué digo?: para Bonasso no es mala per se; solo hay que controlarla.

Eso no es todo; las ventajas acordadas a la Barrick por nuestro finado presidente-prócer en 2004 tienen, según Bonasso, estos defectos espantosos: “El 90 por ciento del agua la pone la Argentina y sólo el 10 por ciento Chile” y “a la Argentina le quedará el ciento por ciento del lodo cianurado del dique de colas”.

O sea que si las mineras, además de otorgar regalías “decentes”, con sus perjuicios afectaran más a los chilenos que a los argentinos, esto ya sería una fiesta.

¡Moral Nac y Pop!




No hay comentarios:

Publicar un comentario